miércoles, 29 de septiembre de 2010

"La Revolución Gentil en La Casita Encantada"



"La Revolución Gentil comenzó calladamente hace más de medio siglo. Era, y continúa siendo, la más gentil de las revoluciones.Considere el objetivo de la Revolución Gentil: dar a todos los padres el conocimiento requerido para hacer niños altamente inteligentes, extremadamente capaces y encantadores, y al hacer esto, hacer un mundo altamente humano, cuerdo y decente.

La Revolución Gentil propone que los niños pequeños tienen dentro de sí la capacidad de aprender virtualmente cualquier cosa mientras que son pequeños. Propone que lo que los niños aprenden sin ningún esfuerzo consciente a la edad de dos, tres o cuatro años de edad puede ser solo aprendido con gran esfuerzo, o puede no ser aprendido más tarde en la vida."

Así comienza el articulo que aparece en la pagina de Los Institutos, explicando en que consiste La Revolución Gentil. No se me ocurre una mejor manera para explicar o ilustrar nuestro objetivo a lograr, lo que aspiramos para nuestros alumnos... Los chicos están constantemente aprendiendo, cada minuto de su agitada vida es una oportunidad de aprendizaje. Glenn Doman, creador de una de las propuestas que inspiran nuestro quehacer docente, indica que los chicos aprenden de manera mas sencilla sobre grandes obras de arte que sobre caricaturas, sobre la música maestra que sobre canciones infantiles... Nos gusta verlo de la siguiente manera: si los chicos constantemente están absorbiendo información del entorno, mejor proveer información de calidad que información "chatarra"... igual van a aprender lo que se les provea, no?

Durante el curso de su historia, el Hombre ha hecho muchas cosas, unas maravillosas... otras no tanto. Si bien es cierto que por naturaleza tendemos a solo recordar lo negativo, es innegable el aporte positivo de muchos seres humanos bendecidos por el contacto directo con su parte mas sensible, contacto que les ha permitido crear belleza, dejar el mundo, a su manera, mejor de lo que lo encontraron. Dentro de nuestro Programa de Estimulación Cognitiva, ofrecemos a nuestros chicos la oportunidad de conocer Grandes Maestros de las Artes y su obra, maravillas arquitectónicas, países y culturas distintas a la propia... en fin, todo aquello que pueda abrir sus horizontes de pensamiento y a la vez, contribuir con el desarrollo máximo de sus capacidades... recordando siempre que el fin a lograr es el desarrollo de habilidades cognitivas, aumentar las conexiones neuronales, a través del acceso a información de calidad dentro de oportunidades de aprendizaje cuidadosamente creadas. Los niños que son realmente brillantes, conocedores, capaces y seguros de sí mismos son los niños más amables y bondadosos. Están llenos de las características por las que amamos a los niños. La Revolución Gentil procura dar a todos los niños vivos, la oportunidad de ser excelentes... y es ese precisamente nuestro anhelo mas caro.

Hemos estado trabajando con nuestros chiquitos a Beethoven, Juan Luis Guerra y la maravillosa música de ambos, además a Vincent Van Gogh y su amplia producción pictórica. De cada uno de estos personajes, los chicos han conocido datos biográficos importantes de cada uno, además de "degustar" algunas de sus obras y composiciones... y la respuesta ha sido maravillosa, entusiasta... su curiosidad es insaciable! Hemos grabado algunas sesiones en vídeo, vídeos que esperamos poder publicar bien pronto. Mientras tanto, compartiremos un vídeo publicado en el canal de youtube del colegio Valle Filadelfia. Cabe mencionar que este colegio cuenta con la bendición de Glenn Doman y Los Institutos, siendo dirigido por la maestra Elisa Guerra, quien es la directora de Los Institutos para America hispano parlante. Trabajo como el que hacen alli es lo que tratamos de emular dia a dia. Espero que lo disfruten.

lunes, 27 de septiembre de 2010

Quienes somos y lo que hacemos

Aprender a leer antes de aprender a decir "mamá", clases de inglés a partir de los tres meses, arte, cultura y conocimientos enciclopédicos desde los dos años… Bienvenidos al mundo de la estimulación temprana. ¿Sirve para algo o es sólo una moda?

Es la una de la tarde en "La Casita Encantada"... los chicos se han marchado a casa, muy contentos. En sus clases han estudiadado inglés y matemáticas, han visto familias de distintas partes del mundo, han trabajado con Juan Luis Guerra y Beethoven, escuchando sobre su vida y escuchando sus composiciones y han contemplado un autorretrato de Van Gogh.

Los alumnos de "La Casita Encantada" tienen entre 2 y 5 años de edad. No se han enterado demasiado, pero no importa. En ningún momento perseguimos que el niño memorice ni repita nada. El objetivo no es ése. Lo que buscamos es crear nuevas conexiones y circuitos neuronales, dotar al niño de habilidades que le sirvan para toda su vida, y crear en él nuevos intereses a la vez que satisfacemos su enorme curiosidad. Eso es todo. 

Durante una de estas sesiones, que son cortas pero intensas, nuestros chicos no tienen que repetir ni demostrar que aprendieron o memorizaron todo, algo o nada. Nuestra propuesta esta inspirada en el método del doctor Glenn Doman, cuyas investigaciones se centraron, al principio, en la rehabilitación de niños con lesiones cerebrales y que, en vista de los maravillosos resultados obternidos, decidió aplicarlas también a bebés sanos. Su técnica más conocida es la de los bits de inteligencia, unas tarjetas con estímulos visuales: palabras, conjuntos matemáticos e imágenes de enciclopedia.

Estas actividades se realizan se realizan en inglés y en español.  Rosina Uriarte, directora del CBET - Brisbane, en Cantabria, dice: «Hasta los cuatro años el cerebro está estructuralmente preparado para la adquisición de lenguajes. Es lo que los teóricos denominan la ventana temporal. Una vez pasada esta edad se cierra la ventana y el aprendizaje de las lenguas va a suponer grandes esfuerzos. La razón es que todos los idiomas utilizan las mismas frecuencias bajas. Sin embargo, las frecuencias más altas difieren mucho. El inglés, por ejemplo, utiliza una gran variedad de sonidos agudos, que van desde los 2.000 a los 12.000 hercios. El castellano usa frecuencias de 1.000 a 3.000 hercios. En la práctica, somos ‘sordos’ ante las frecuencias utilizadas en otros idiomas. Pero si los niños las escuchan desde muy pequeños, se crean circuitos entre las neuronas. Cuando les contamos un cuento en inglés no pretendemos que lo entiendan. Lo que queremos es consolidar esos circuitos cerebrales para que se conviertan, a largo plazo, en autopistas de información». Son estas "ventanas de aprendizaje" o "umbrales" lo que pretendemos aprovechar.

Durante sus clases o sesiones de aprendizaje, los chicos son constantemente expuestos a la palabra escrita. En la lectura global que se emplea en nuestras sesiones de estimulación temprana, se le enseña al alumno la palabra "mesa", por ejemplo. Y se le muestra una cartulina con la palabra completa al tiempo que se pronuncia en voz alta. El pequeño tiende a ver la palabra como un todo. No se fija en las letras. La memoria visual suele ser mejor que la auditiva, de este modo, el pequeño va familiarizándose con la palabra escrita. Con el tiempo, puede estar leyendo sin ser consciente de haber aprendido a leer, como sucede con el lenguaje hablado. Ahora bien, no debe ponerse a los bebés a escribir. No hay que saltarse etapas. Y, lo que es más importante, en estas sesiones, la lectura es un juego, el juego de la lectura. 

El juego es primordial en estas sesiones, que los niños se lo pasen "bomba". No se trata de crear genios. Nuestro objetivo es apoyarlos en su desarrollo, no meterles presión para que sean niños diez. Es el sistema educativo el que les mete presión, el que se salta las etapas, el que pretende que empiecen la Primaria sabiendo leer y escribir. Y tiene a los alumnos en preescolar sentados en sillitas, haciendo fichas, cuando es importantísimo que se muevan. La fase de suelo es fundamental. El gateo, actividad incluida en nuestro programa de desarrollo psicomotor, es un ejercicio que madura el cerebro y trabaja la convergencia ocular, muy importante para la lectura y la transmisión de información de un hemisferio a otro. Además, no hay exámenes. Y, por tanto, no hay respuestas equivocadas. Y tampoco se destruye la autoestima de los que les toma mas tiempo aprender. Por eso, cuando uno de nuestros alumnos mas chicos, ante el autorretrato de Van Gogh grita "Bongo", es sólo una anécdota. Tiene dos años. Cuando en el colegio le hablen del postimpresionismo, no le sonará a chino.